El mejor amigo de Elvis habla en exclusiva Jerry Schilling

Jerry Schilling: "Elvis se fue con una pena: nunca lo tomaron en serio como actor"

El secretario personal y uno de los mejores amigos del cantante revela su lado humano a 30 años de su muerte.


Hay un apelativo informal con que el mundo de la música conoce a Jerry Schilling: "Fue el único de sus cercanos que nunca traicionó a Elvis Presley". Un acto de justicia con uno de los pocos miembros del círculo más íntimo del "Rey" (centrado en la llamada "Mafia de Memphis") que nunca hizo negocio con las penumbras del cantante. Mientras en los años 70 varios guardaespaldas facturaban millones con libros y entrevistas que ventilaban sus secretos más retorcidos, Schilling lo defendía. Por eso tras su muerte hace exactos 30 años, el 16 de agosto de 1977, la familia del cantante le confió el manejo administrativo de su herencia y hasta tuvo a su cargo la carrera de Lisa Marie Presley.Como agradecimiento, Schilling publicó en 2006 el libro "Me and a guy named Elvis: My Lifelong Friendship with Elvis Presley", texto donde detalla los talentos ocultos, las frustraciones y momentos íntimos de su amigo, como un fiel retrato de la relación que comenzó en 1954."Nos conocimos en el vecindario. Yo lo había escuchado cantar 'That's all right (Mama)' en la radio y me parecía fabuloso. Una tarde estaba jugando fútbol americano y me invitó a completar su equipo. Yo apenas tenía 12 años y él 19, pero para Elvis era difícil relacionarse con gente de su edad. Era un poco acomplejado y para nada popular", recuerda Schilling.-¿El cambio fue muy grande con la fama?"Totalmente, se liberó de la timidez. Me integró como secretario en 1964, comencé a ser parte de la familia y diría que era un tipo que gozaba mucho de la fama y los fans. Nos quedábamos conversando todas las noches de los rumbos de su carrera, de la vida y el éxito, él tampoco quería que todo se centrara en su atractivo como persona".-¿El lado musical de Elvis fue superado por el mito?"En parte sí. Elvis ha sido uno de los más talentosos productores que yo haya conocido. Ensayaba hasta dar con el sonido perfecto, tenía un oído increíble para manejar los códigos del country, el gospel, la música negra. Sabía cuándo uno de sus temas sería un hit o un fracaso. Por eso no entiendo cuando le atribuyen cierto conservadurismo, cierto racismo, porque era uno de los músicos más abiertos a nuevos ritmos que he conocido".-¿Fue su mayor frustración?"No, su mayor pena fue que nunca lo tomaron en serio como actor. Estaba aburrido de los papeles a su medida, de los roles de galán. Quería algo más profundo que sintió que nunca le dieron. Fue el único punto donde se sintió un mediocre".-¿Cómo vivió usted la muerte de Elvis?"Yo era manager de los Beach Boys y estaba preocupado por ellos. De Elvis me preocupaba su círculo cercano, quizás no era el mejor para esos años complejos. Estaba en la casa que él me regaló en California y me llamó su peluquera para avisarme. Quedé impactado y realmente no supe qué hacer todo ese día".Para entender su música"ELVIS AT SUN"Todos los singles que grabó para esas tempranas sesiones de 1954 y 1955, cuando se codeaba con Johnny Cash o Roy Orbison en Sun Records. Rock and roll, R&B y country, en uno de los mejores compilados de sus inicios. A la venta en Chile."PEACE IN THE VALLEY: THE COMPLETE GOSPEL RECORDINGS"Para los amantes del enorme talento vocal del "Rey", de su capacidad para transformar plegarias en bellísimos productos pop, este box set de tres discos y más de 100 canciones es esencial. A US$ 39.97 en Amazon."FROM ELVIS IN MEMPHIS"Puro soul blanco. Mientras en 1968 Hollywood lo domesticaba para cintas insulsas, el "Rey" volvía a Memphis para nutrirse del soul que invadía la ciudad. Una mudanza efectiva y poderosa: "In the ghetto" y "Suspicious mind" son los resultados. Disponible en Chile."LIVE FROM LAS VEGAS"De la larga lista de compilados que resumen sus shows en Las Vegas, éste es uno de los más precisos para entender a Elvis como un artista conectado con su tiempo: hay impresionantes versiones para "Sweet Caroline", de Neil Diamond, y "Proud Mary",